Ginecología Oncológica y cirugía robótica

La evolución natural de la cirugía ginecológica

La ginecología oncológica comprende el cáncer de ovario, útero y endometrio; así como la patología mamaria. Las pacientes diagnosticadas de cáncer de útero, cáncer de endometrio y cáncer de ovario en estadio temprano pueden beneficiarse de ser operadas por robot. 

Los avances en cirugía mínimamente invasiva son particularmente significativos en cirugía pélvica. La pelvis femenina es un espacio estrecho donde confluyen múltiples estructuras como el útero, los ovarios, la vejiga, el recto, venas, arterias, nervios y todos ellos interconectados.

Gracias a la cirugía robótica da Vinci, es posible acceder a estas estructuras con delicadeza y precisión, por lo que los cirujanos son capaces de realizar cirugías complejas de forma mínimamente invasiva, disminuyendo los riesgos y mejorando el proceso de recuperación.

¿En qué consiste la cirugía robótica ginecológica?

La cirugía ginecológica robótica se realiza desde el 2007 y actualmente hay gran experiencia en cirugía robótica para la mayoría de las operaciones ginecológicas. La utilización del robot da Vinci se centra principalmente en la patología oncológica, pero su uso en patología benigna, como el tratamiento de la endometriosis, está siendo cada vez más implementada gracias a sus ventajas, sobre todo en casos complejos. 

Las ventajas de la cirugía mínimamente invasiva son menor pérdida de sangre, menor duración de la estancia hospitalaria y menor morbilidad del paciente en comparación con los procedimientos abiertos. El robot da Vinci permite además, una mejor exposición del campo de operación mediante la tecnología 3D y la extensión de los instrumentos quirúrgicos a 7 grados de libertad. Por otra parte, el cirujano permanece sentado durante la cirugía, lo que reduce la fatiga en intervenciones largas y complejas. 

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